Vallecaucanos
e ingleses se unen por la comuna 21 de Cali
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La
profesora Ángela María Franco de la Universidad del Valle
y Felipe Hernández de la Universidad de Cambridge durante la
exposición del grupo de investigación sobre la
intervención de la comuna 21 de Cali.
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Investigadores del instituto Cities South of Cancer, de U. de Cambridge, trabajan con Univalle.
Problemas de inseguridad, violencia, pobreza y deterioro ambiental es
lo que se percibe y sale a flote cuando se habla de la comuna 21, en el
Distrito de Aguablanca, en el oriente de Cali. Ahí se encuentra
Potrero Grande, que no pocos relacionan con esa crisis social.
Pero poco se sabe sobre la creatividad y emprendimiento de su
población. Cría de animales, actividades
agrícolas, ensamblaje de electrodomésticos, talleres de
costura y preparación de alimentos hacen parte de las
iniciativas de autogeneración de empleo familiar y sustento y en
ocasiones también oportunidad laboral para terceros.
A esto se suman organizaciones de vecinos que ofrecen servicio y apoyo
social, como hogares geriátricos, parvularios y bibliotecas.
Ahora hay una ‘mirada’ inglesa a ese amplio sector de la
ciudad y que a través de la Universidad de Cambridge en alianza
con la Universidad del Valle, se plantea una intervención en
este sector.
Esa mezcla de problemas y soluciones, no siempre tradicionales,
llevó al grupo de investigación Cities South of Cancer
(CSC) de la Universidad de Cambridge, Inglaterra, considerada como una
de las mejores del mundo, a hacer una intervención en la zona,
lo que implicó estudiar los problemas más álgidos
de esta población y a presentar algunas soluciones.
La intervención se ocupó en primer lugar en identificar
las actividades productivas más importantes de la zona de tal
manera que dichas actividades, usualmente extra-legales (mas no
ilegales) puedan ser desarrolladas para jugar un papel más
importante en la economía de la ciudad a través de la
elaboración de un programa de mejoramiento ambiental.
La propuesta es potencializar esas actividades y generar empleo,
recuperando el jarillón de Río Cauca por medio de un
ecoparque productivo y educativo.
El diseño del parque tiene en cuenta el trabajo de
diagnóstico que hizo el grupo de expertos Royal Haskoning, de
los Países Bajos, que vino a Cali, a estudiar el problema de las
inundaciones en el Valle del Cauca, por invitación del gobierno.
El ecoparque productivo y educativo también será parte de
una estrategia de prevención de las inundaciones, recuperando el
río para la ciudad.
Un segundo aspecto se relaciona con la movilidad, con una estrategia
para mejorar la red del transporte permitiendo desplazamientos
más rápidos entre el sector, ubicado en el oriente de la
ciudad y el occidente del municipio.
Actualmente la dirección dominante de las vías y las
rutas de transporte en Cali sigue el eje sur-norte, lo que genera
demoras e inconvenientes para quienes se dirigen a otros lugares de la
ciudad.
La estrategia para mejorar el transporte incluye ciclovías,
transporte por el Río y la extensión y redireccionamiento
del transporte público.
En síntesis, la estrategia urbana articuladora de la
intervención ayudará a capacitar sus habitantes e
impulsar la industria local y a mejorar la movilidad.
No es la primera vez que el grupo de investigación Cities South
Cancer (CSC), que trabaja en las ciudades bajo el trópico de
Cáncer, hace intervenciones en comunidades periféricas de
escasos recursos económicos.
La Universidad de Cambridge apoya proyectos en África, Asia y
América. Su fin es avanzar el conocimiento y descubrir
mecanismos de acción para mejorar las condiciones de vida de las
personas. Es por esa razón que Cambridge ha apoyado el trabajo
de CSC en Argentina, Bangladesh, Indonesia y México, donde el
grupo recibió el Premio Cemex 2014 por su trabajo en la
comunidad de Sombrerete, adelantado con la colaboración del
Instituto Tecnológico de Monterrey en Querétaro.
A través de una estrategia que ellos llaman ‘Urbanismo
Articulador’, Cities South of Cancer intenta crear nuevas
metodologías de trabajo para analizar e intervenir en ciudades
como Cali, para pasar a un diseño innovador y mucho más
efectivo que el urbanismo tradicional.
Para el desarrollo del proyecto el CSC incluyó a seis
estudiantes de doctorado de la Universidad de Cambridge, pero
también contó con el apoyo de 25 estudiantes de
arquitectura de la Universidad del Valle, bajo la coordinación
de la profesora Ángela María Franco, actual vicerrectora
de investigaciones.
Los estudiantes caleños, quienes en su sentido de pertenencia
con la ciudad trabajan en forma voluntaria, viajaron a mediados de 2014
a Inglaterra para exponer lo realizado y recibir
retroalimentación de quienes han participado en otros proyectos
similares.
El proyecto en la comuna 21 seguirá su desarrollo con el apoyo
económico de instituciones que apoyan la investigación en
Inglaterra, pero es necesario el apoyo de instituciones similares en
Colombia para entregar el proyecto a la alcaldía de la ciudad.
Usualmente el común de la gente y las administraciones
municipales o regionales piensan que el costo de intervenciones urbanas
como la propuesta por el grupo CSC y la Universidad del Valle es muy
alto.
Sin embargo en sitios como la Comuna 21, anualmente se invierte mucho
dinero arreglando daños causados por la lluvia o crecientes del
río, pagando indemnizaciones a los damnificados de la violencia
o a través de los servicios de salud ayudando a las personas,
cuando la situación podría mejorar si vivieran en un
ambiente urbano más saludable.
Precisamente Potrero Grande es un complejo habitacional construido por
el gobierno municipal para reubicar a familias que desde hace varios
años habían invadido el jarillón que se extiende a
orillas del Río Cauca, con lo que ponía en riesgo el
propósito para el que fue construido: proteger la ciudad de
inundaciones en los inviernos intensos.
Como no existe un dato global que indique cuánto se gasta el
gobierno en todos estos rubros, no es posible compararlos con el costo
de una intervención urbana como la propuesta que no solo
reduciría costos como los mencionados sino que también
traería beneficios económicos, sociales, ambientales y de
salud pública, para toda la ciudad.
De adelantarse y ejecutar el proyecto, en su totalidad, a lo largo de
toda la comuna 21, en 15 años se podrían beneficiar
directamente los 100.000 habitantes de la comuna 21, pero lo más
importante es que un proyecto de esta magnitud beneficiaria a los dos
millones 800 mil habitantes de toda la ciudad y, su efecto,
repercutiría en todo el país.
Caleño destacado en Cambridge
El CSC es dirigido por el profesor Felipe Hernández, arquitecto
caleño de la Universidad de San Buenaventura de Cali, con
maestría en Arquitectura (Cum Laude) de la Universidad de
Nottingham y con un doctorado en Arquitectura de la misma Universidad,
ambas en Inglaterra.
Es profesor titular en el Departamento de Arquitectura de la
Universidad de Cambridge y el primer colombiano en toda la historia de
esa institución en ocupar un puesto de profesor titular.
Además será profesor invitado en la Universidad de
Harvard para el 2015.
De ejecutarse el proyecto, en su totalidad en la comuna 21, en 15
años se podrían beneficiar directamente sus 100.000
habitantes, “pero lo más importante es que un proyecto de
esta magnitud beneficiaría a toda Cali”.